jueves, 3 de junio de 2010

Huellas


El dolor del que ama puede ser desgarrador
cuando penetra en  territorio alma.
¿Por qué sentir? Si ya no existe tu cuerpo
¿Para qué sufrir? Si te he empezado a olvidar
La voz de mi conciencia  me promete el desamor
 y tejo mi olvido como abnegada Penélope
en la soledad de mi presente

El dolor no está de moda 
y el llanto tiene fecha de caducidad
quizás seré yo misma
quien te sustituya pronto...